Los caraqueños iniciamos este 2013 en medio de más incertidumbre, inseguridad y violencia, pagando a mayor precio los alimentos, las medicinas y el transporte, ¡ya sentimos el desabastecimiento! Nuestro dinero cada día vale menos; los pobres cada vez somos más pobres, mientras las élites del gobierno Municipal y del Distrito Capital engordan sus bolsillos a costa de las calamidades de la gente. Caracas es una ciudad extremadamente insegura, con carencia de funcionarios policiales y para colmo algunos son utilizados como escoltas de los jefes políticos y sus familiares, mientras ocurren hechos de violencia como es el caso del sacerdote de la parroquia de Caricuao y el grave acontecimiento de Casalta. Es la ciudad del delito sin responsables, la impunidad se ha convertido en el primer aliado de la delincuencia.
La ciudad está enferma, ¡tan enferma está! que nuestros niños nacen después de un largo ruleteo por hospitales y maternidades, lo cual se agrava por la falta de insumos, personal médico y nuevas instalaciones sanitarias.
De ser la sucursal del cielo, Caracas se ha convertido en la capital del caos. Su vialidad está deteriorada y es insuficiente; el transporte de superficie está desorganizado. En igual orden, las edificaciones multifamiliares se construyen sin planificación ni áreas comunes. En sus calles nos encontramos con el lastimoso desborde de los indigentes. Los servicios públicos están colapsados y vemos cómo ¡ya el agua no es tan potable! y la electricidad no alumbra como antes.
Las escuelas de la ciudad son insuficientes y las que existen no garantizan plenamente la seguridad de niños, docentes y padres. Es lamentable decirlo, pero ahora los padres entierran a sus hijos.
Las autoridades gubernamentales en vez de dar soluciones, cada día mienten más; por lo que crece el descontento y la frustración por todas las promesas incumplidas. Todo ello ha generado un gran desaliento.
Los caraqueños estamos cansados de manipulación, no nos conformamos con maquillajes y retórica, ¡queremos un cambio de verdad, con la fuerza y la voluntad de todos!
Por ello, los factores políticos que conformamos la Mesa de la Unidad Democrática convocamos al pueblo caraqueño a seguir un nuevo rumbo que debe ser encarnado por mujeres y hombres comprometidos con un proyecto nacional que dé respuesta a las políticas ineficaces que no han impulsado las transformaciones que con urgencia reclama nuestra región capital.
Se trata de promover una nueva fuerza política comprometida de manera directa con la gente, pero que a la vez permita la integración de grupos, dirigentes políticos, individualidades, académicos, factores partidistas, empresarios, luchadores sociales.
Convocamos desde MUD-Caracas a todos los caraqueños, incluso a los compatriotas chavistas a quienes les robaron la esperanza, para trabajar unidos en una plataforma centrada en tres direcciones principalmente:
1. UNIDAD EN TORNO A UN PROGRAMA PARA CARACAS que nos permita construir una democracia verdadera con justicia social.
2. UN ESPACIO PARA LUCHAR promoviendo la coordinación, el apoyo y la solidaridad entre los distintos sectores que buscan defender sus reivindicaciones sociales. La Mesa de la Unidad Democrática de Caracas no solo está llamada a las luchas electorales, sino a impulsar un gran movimiento de masas que con banderas unificadas le plantee al gobierno nacional y local las exigencias de seguridad social, empleo digno, educación popular y democrática, salud de buena calidad para todos, entre otros muchos reclamos justos del pueblo caraqueño.
3. UN MOVIMIENTO CIUDADANO EN DEFENSA DEL VOTO para el rescate de los espacios de elección popular. Ratificamos que el camino es el cambio democrático pero consideramos que es fundamental en este momento organizar la lucha por mejorar las condiciones electorales mínimas que garanticen la competitividad y el debido respeto a la voluntad popular. ¡Basta de ventajismo gubernamental!
Construyamos juntos una Caracas, donde todos podamos convivir sin exclusiones, sin amenazas y sin miedo.
Estamos convocados por la historia a la unidad, a la transformación social y reconciliación de nuestro pueblo.
“El fututo es nuestro si se siembra desde hoy”.
Mesa de la Unitaria Democrática- Caracas
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