miércoles, 28 de septiembre de 2011

Pablo Pérez une oposición y pueblo descontento para abrir caminos al cambio y al progreso

Venezuela está urgida de un cambio. Un cambio que devuelva al pueblo venezolano la esperanza de una vida mejor, de una sociedad más justa y de una patria unida, soberana y de grandeza. El régimen actual ha estafado ese sentimiento de cambio y desperdiciado una oportunidad histórica para superar los graves males económicos, sociales y políticos que ha venido padeciendo nuestra patria. Hoy somos más dependientes, más vulnerables y menos soberanos. Pobreza, desempleo, inseguridad, caos en los servicios se unen a la destrucción de nuestras capacidades de producción industrial y agrícola para mostrar un cuadro que nos regresa a las primeras décadas del siglo pasado.

Hay condiciones más que suficientes para construir una victoria contundente frente al actual régimen, si fortalecemos la unidad interna, no generamos polémicas subalternas y dotamos de amplitud, grandeza y aliento histórico la alternativa que estamos construyendo. Las elecciones primarias son la oportunidad para labrar esa esperanza de cambio. Como eje de este esfuerzo, van estrechamente ligadas al Compromiso por un Gobierno de Unidad Nacional, aprobado el lunes pasado, y a las líneas generales del programa de gobierno que serán presentadas el venidero 23 de enero de 2012. Otro importante factor para lograr el triunfo es vincularnos y estimular las luchas sociales que fortalezcan un movimiento popular autónomo, democrático, fuerte y decidido. Así evitaremos que la polarización desvíe la atención de los problemas y angustias de la gente y reduzca la política al monotemático dilema Chávez SÍ-Chávez NO.