Natividad Cobos con parte de los jóvenes trabajadores |
El sistema data de hace 50 años cuando en la zona vivían solo unas 12 familias, a las que progresivamente se fueron añadiendo residentes hasta llegar a las 300 familias actuales, más el liceo Tito Salas (mil 300 estudiantes), una escuela y varias empresas, todas conectadas en el mismo sistema de aguas infecundas.
El martirio que sufría este barrio cada vez que llovía, con brotes de aguas sucias que inundaban las casas y producían enfermedades, está siendo subsanado por la labor comunitaria de Bandera Roja, cuyo norte inmediato es la satisfacción de las necesidades primarias de la población y la generación de oportunidades.
La obra consta de 110 metros de tubería en cuya substitución trabajan 14 obreros que habitan en la zona y se encontraban desempleados. “Con esta oportunidad y la ayuda brindada por albañiles y profesionales de Bandera Roja, dejamos el ocio a un lado y estamos listos para insertarnos en el campo laboral. La comunidad está muy contenta, apoya todo este trabajo. Aquí nadie le dolía está comunidad, llegó Bandera Roja, llegó Natividad y comenzamos a meterle el pecho”, dijo uno de los trabajadores.
Tal es el caso de Néstor Durán Castillo, joven discapacitado de 32 años que nunca ha recibido trabajo por su condición, pero que reúne todas las condiciones para realizar tareas importantes. “Es el que más trabaja”, asegura Natividad Covos, líder comunitario de la zona.
El dirigente resaltó que los trabajadores están bien equipados como exige la ley: botas, audífonos para el percutor, lentes, horas de descanso, seguro y cestatickets, “pues si nosotros en Bandera Roja, somos los voceros de la clase obrera, debemos actuar en función de las exigencias históricas que siempre hemos levantado”, dijo.
Destacó que tanto chavistas como opositores están conformes con el trabajo emprendido, pues reconocen que el alcalde Carlos Ocaríz cumplió los compromisos sostenidos en el caso de este proyecto. “No es un tema politiquero de decir que somos nosotros en Bandera Roja, es que fuimos nosotros los que lo peleamos. La mayoría de esta comunidad está con nosotros porque trabajamos desinteresadamente, estos obreros, son obreros del partido de la clase obrera y de la comunidad que los vio nacer”, precisó.
Covos se conmovió ante las constantes visitas de las familias de los jóvenes a su casa para felicitarlo porque sus hijos no conseguían trabajo y ahora tienen como llevar sustento a su hogar, con preparación para emprender nuevos retos.
“La organización del pueblo para la lucha, es la fórmula para alcanzar victorias, abriendo paso y combatiendo la apatía, la desidia y el olvido al que nos arrojaron los distintos gobiernos nacionales, de la Cuarta y de la Quinta República. En Mariches seremos ejemplo de gestión comunitaria, con honradez, ejecutando esta política pública con la honestidad que siempre nos ha caracterizado, pues eso siempre da buenos resultados”, concluyó.
Contacto Prensa:
Carlos Javier Arencibia
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